Después de años, las paletas neutras han guiado la decoración de interiores, apostando por la serenidad y la continuidad visual. Sin embargo, las nuevas modas reclaman volver a jugar con el color, a experimentar y a recuperar la energía del diseño más genuino. En este contexto nace Primary Play, la tendencia que CIN Valentine, empresa líder en la creación y venta de pinturas y barnices, destaca como una de las propuestas más estimulantes de la temporada.
Primary Play reivindica los colores primarios —rojo, azul y amarillo— reinterpretados desde una óptica contemporánea, más saturada, expresiva y versátil. La idea es clara: transformar los espacios en lugares llenos de dinamismo, personalidad y emoción, donde el color no solo decora, sino que inspira.
Volver a lo esencial… para crear algo nuevo
A pesar de tratarse de los tonos más básicos del círculo cromático, Primary Play abraza su potencia para generar atmósferas modernas, optimistas y llenas de carácter. CIN Valentine muestra cómo esta tendencia permite reinventar cualquier estancia gracias a su energía inconfundible.
Los rojos luminosos, como #3213 Rojo Nirvana, aportan vitalidad y calidez, perfectos para acentuar paredes, rincones de lectura o piezas clave del mobiliario. Por su parte, los azules profundos ofrecen equilibrio y serenidad sin renunciar al impacto visual, convirtiéndose en aliados idóneos para dormitorios o espacios de concentración. Un gran ejemplo es #E253 Azul Dragón. Por último, los amarillos intensos del estilo de #1616 Amarillo Jazmín inyectan luz y creatividad, convirtiéndose en protagonistas de cocinas, estudios y zonas de juego.
Cómo aplicar Primary Play sin sobrecargar el espacio
Trabajar con colores primarios puede parecer arriesgado, pero existe una forma sencilla de mantener el balance: establecer un elemento conductor. Esto puede lograrse eligiendo una gama cromática principal —por ejemplo, dos de los tres colores primarios— y repetirla en paredes, textiles, accesorios o incluso obras de arte.
Los patrones geométricos y las composiciones modulares también son una herramienta clave. Mezclar diseños que compartan la misma base cromática, aunque varíen en forma y escala, unifica el ambiente y aporta dinamismo sin caer en el exceso.
Otro recurso infalible es la creación de puntos focales: una pared protagonista en azul intenso, un mueble destacado en rojo vibrante o un pasillo iluminado con un amarillo vivo.
Color para expresarse
Esta tendencia no solo invita a decorar: propone una manera de vivir el hogar desde el juego, la creatividad y la libertad expresiva. El color se convierte en un medio para transmitir optimismo, energía y autenticidad. Es por ello por lo que CIN Valentine anima a recuperar la curiosidad, experimentar y atreverse a disfrutar del color en su máxima esencia.
¿Listo para redescubrir los colores que lo empezaron todo?




