Delta Cocinas ha participado por primera vez en Casa Decor y ha sido galardonada con el premio al mejor producto. El Jardín Hidropónico ha sido la pieza elegida por el jurado por ser el producto mejor aplicado y en línea con esta edición sostenible.
El jardín hidropónico cuenta con un sistema completamente digitalizado de producción vegetal intensiva, similar a las utilizadas en los programas de exploración espacial y está protegido por un mueble con acabado superficial Delta ECO libre de tóxicos y puertas artesanales de fresno ahumado medio diseñado para este fin. En su parte inferior cuenta con un dispositivo que gestiona de manera autónoma el huerto analizando y controlando su temperatura, humedad, flujo de agua y nutrientes, así como la cantidad de horas de luz. El interior del mueble vira del rojo intenso al dorado según donde se posicione el espectador y la luz que incida gracias a su laca en tornasol.
En esta edición en el espacio #casadecorsostenible de Delta, el compromiso con la naturaleza ha sido total ya que la vida ha brillado en todo su esplendor. Además del mobiliario ecológico presentado con piezas 100% reciclables se han incluido materiales y elementos propios de la naturaleza como el musgo vivo islandés de las bóvedas, el jardín hidropónico con fresas y plantas aromáticas, plantas en las columnas coplanares, iluminación central y balcón, y las semillas de todo el material comercial de Delta.
Este proyecto de mobiliario donde el espacio del hábitat doméstico se fusiona con un huerto eco-urbano facilita a individuos y familias el autoabastecimiento gestionando la producción de sus alimentos de forma ecológica. Es un proyecto resultante del duro confinamiento y la situación en la que nos hemos visto inmersos durante esta pandemia. Una solución para acercar los productos sanos, frescos y ecológicos a cualquier parte, especialmente a grandes ciudades y sin salir de la cocina. Además, ese acercamiento a la naturaleza no solo nos ayuda a tomarnos la vida de una forma más relajada, sino también sentir esa conexión con la tierra que nos permite disfrutar día tras día del crecimiento de flores, tomates o calabacines dentro de nuestra cocina. Un proyecto que se diseña combinando en el mismo lugar, el ciclo alimentario completo desde su preparación hasta su consumo. Sostenibilidad y naturaleza en la cocina.
El cuidado de un pequeño huerto con hortalizas frescas, o incluso la mera presencia de flores naturales, aportan múltiples beneficios físicos y psicológicos. Desde la regulación de la presión arterial, hasta una bajada de los niveles de cortisol en sangre que sin duda mejorarán significativamente el nivel de bienestar en el hogar y de las personas que lo componen.
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